Si alguna vez se vuelve fría la madrugada,
abrázame fuerte y sosténme entre tus brazos,
tu que sabes la verdad de lo que guardo dentro,
no me abandones nunca al vacío del firmamento.
Abrázame siempre y ayúdame a permanecer parada,
acompáñame en el camino de la alborada,
quédate a mi lado en todo momento,
sé mi descanso y mi alimento,
devuélveme los sueños
hechos realidad en nuestra vida,
y no te alejes nunca,
compartamos los días que nos quedan
siempre unidos bajo el sol que nos cobija.
Instantes que son recuerdos. Que fueron fiesta y pesadillas, silencio y clamor. Instantes que hacen de una vida lo que son: pedacitos del alma...
jueves, 24 de septiembre de 2009
martes, 22 de septiembre de 2009
LXI
Ya nosé si fui sabia, loca o prudente;
solo sé que en aquel momento
toda la gente alrededor desvaneció
en el momento que renació mi corazón.
Y si acaso ese sentimiento
me mantuvo desvelada en el intento;
le dió nueva razón de ser
a mi vida con el tiempo.
Una noche clara de verano,
llegó, al fin, risueño;
su cabeza en mi pecho,
sus labios en mis besos,
sellando el renacer
de una nueva historia
que nos regala
la promesa de lo eterno.
solo sé que en aquel momento
toda la gente alrededor desvaneció
en el momento que renació mi corazón.
Y si acaso ese sentimiento
me mantuvo desvelada en el intento;
le dió nueva razón de ser
a mi vida con el tiempo.
Una noche clara de verano,
llegó, al fin, risueño;
su cabeza en mi pecho,
sus labios en mis besos,
sellando el renacer
de una nueva historia
que nos regala
la promesa de lo eterno.
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